Meta:
Ventajas:
Especificaciones temporales para el equipamiento con un TPMS:
Durante la fabricación del vehículo deberá integrarse un TPMS directo o indirecto, una instalación posterior será considerada como no conforme a normas.
Características del TPMS según la legislación UE:
Durante la fabricación del vehículo deberá integrarse un TPMS directo o indirecto, una instalación posterior será considerada como no conforme a normas. Si durante una inspección principal se detecta un TPMS no apto debido a una falla menor según la Sección 29 del Reglamento Alemán de Licencias de tráfico por carretera (StVZO), el propietario/conductor del vehículo deberá resolver este problema de inmediato.
¿Qué es TPMS indirecto?
Utilización de sensores existentes en el ESP/ABS para determinación de la presión del neumático mediante la velocidad de giro del mismo y el envío de los datos a la unidad de control central (ECU = Electronic Control Unit).
En caso de pérdida de presión:
Comparación con el TPMS directo:
Monitoreo de la presión de los neumáticos con ayuda de sensores en cada neumático, que miden la presión y la temperatura, envían los datos registrados por radio a un receptor central, procesamiento de los datos, indicación en el display del conductor.
Comparación con el TPMS indirecto:
En las situaciones siguientes el propietario/conductor del vehículo o el taller visitado entra en contacto con el TPMS directo:
Consecuencias para el propietario/conductor del vehículo:
Debido a la tecnología compleja del TPMS, para el propietario/conductor del vehículo es muy difícil realizar el servicio de los neumáticos por sí mismo. Cuando se enciende la señal de advertencia (p.ej. en caso de neumático o sensor defectuoso) y para el cambio del neumático, el mismo debe recurrir a un taller que cuente con el servicio correspondiente.
Consecuencias para el taller:
Por lo tanto, para los talleres es absolutamente necesario prepararse para la nueva tecnología y tomar medidas tempranamente para prestar servicios a clientes con TPMS en el vehículo, y así posicionarse como especialista en esta área del mercado.
Actualmente hay numerosos vehículos con un TPMS directo en el mercado, razón por la cual los talleres serán confrontados con el software y los pedidos de servicio de los clientes antes del 1º de noviembre de 2014.
En los próximos años aumentará aún más la cantidad de vehículos con un TPMS. Todos estos vehículos tienen necesidad de sensores de recambio para equipar los neumáticos de invierno, lo que resulta en un enorme potencial de venta de los servicios relevantes.
Además del know-how necesario, los talleres deben disponer de herramientas apropiadas (p.ej. para diagnosticar problemas o para programar los sensores) y de piezas de recambio (p.ej. juntas, válvulas o sensores completos).